¿Qué conseguirás?
Lo que vas a conseguir es tener a un experto de branding valorando tu situación y resolviendo tus dudas. Siempre digo que somos pequeños y necesitamos ser lo más estratégicos posible. Empezando por el nombre que eliges para tu marca o tu tag-line, pasando por tus valores de marca y aquello por lo que te diferencias y terminando por tu manera de construir tu marca día tras día.
La mayoría de mis clientes, incluso aquellos que vienen del mundo de la comunicación y han trabajado en grandes compañías, se sienten muy confusos cuando necesitamos tomar decisiones sobre cómo debe ser y cómo no debe ser su marca. Tener unas directrices claras te permitirá tomar decisiones rápidamente y saber qué debes hacer y cómo debes enfrentarte a muy diversas situaciones. Te puede ayudar a decidir, por ejemplo, si en tu comunicación debes hablar solo para mujeres, solo para hombres o para ambos. O puede que después de analizar tu marca veamos que tu portfolio de servicios no está alineado con tu comunicación y genera confusión. En muchas ocasiones, al analizar bien el cliente ideal y entender dónde aportas más valor, decides que debes enfocarte más en un tipo de cliente y no en todos. A veces, algo tan simple a primera vista como el nombre que eliges se vuelve clave para impactar en tu cliente. Siempre se ha dicho que los pequeños detalles marcan una gran diferencia. Y desde luego, analizar tu branding te va a aportar claridad empresarial, seguro.